Conocí el proyecto BAHN justo antes de irme de vacaciones en 2019, estaba buscando asesoría nutricional fuera de lo convencional, porque mis experiencias previas siempre implicaban el consumo de muchos alimentos sintéticos, endulzantes y restricción de las cosas que más me gustaban como la fruta.
Me gusta el enfoque personalizado y adaptado a lo que uno es, estilo de vida, costumbres, rutinas y metas El foco no es el número en la pesa, es sentirse bien, funcionar mejor y poder hacer todas las cosas que nos gustan, en plenitud. Gozar de buena salud y prevenir lo que se pueda prevenir…
En mi caso el trabajo ha sido a domicilio, donde incluso participa mi mamá que tiene 80 años. Hemos aprendido a comer cosas nuevas, a probar preparaciones diferentes, incorporamos ingredientes, especias, jugos y semillas que antes ni habríamos mirado. Mi mamá que comía muy poco, ahora come bastante más, mejorando con eso su estado general.
BAHN es parte de mi familia, en cada consulta conversamos de cosas más allá de la comida, porque las personas somos la suma de nuestras partes…